Automatización Industrial es un concepto que hace referencia a la ejecución automática de diversas tareas dentro de la producción industrial mediante la aplicación de las innovaciones tecnológicas. Esta aplicación de innovaciones, ya sean de ámbito físico o digital, tienen por objetivo aumentar la capacidad de la producción, la distribución y la comercialización de tu empresa.
Cómo funciona la automatización industrial
El concepto de automatización se apoya tradicionalmente en sistemas electromecánicos o, cada vez más, en aquellos dirigidos por ordenadores. Con ello, conseguimos unos niveles de monitorización y de control de los procesos que serían impensables de otro modo. Todo aparato o máquina incorporado en el área de acción de tu empresa puede beneficiar distintos aspectos de la misma con la reducción de tiempo y de recursos de mano de obra y material que supone.
Por otro lado, el propósito fundamental con el que diseñamos los mecanismos de automatización es el de producir la mayor cantidad de productos en el menor tiempo posible.
Para hacerlo de un modo exitoso, necesitamos incorporar diferentes tipos de tecnología con los que realizar un seguimiento y un alcance más minucioso de los sistemas de producción de tu organización, dentro de su área industrial. Sin la combinación de las distintas tecnologías no seríamos en absoluto capaces de medir con precisión los parámetros que definirán los precisos procesos que cada departamento de tu empresa requiere.
Como ejemplo de lo que estamos hablando, tenemos las tecnologías que sirven para realizar las mediciones de diversas propiedades de la materia: la medición de gases, líquidos o de los sólidos, recurriendo a conceptos como la presión, el peso o el volumen de los elementos. Es decir, que la automatización no implica solamente acciones que tengan que ver con una tarea concreta, también sirve para hacer cuantificables medidas que de otro modo nos llevarían mucho tiempo tomar, así como para hacer traslados de los objetos y materiales a través de sistemas hidráulicos y de motor.
Por qué es tan importante la automatización en la industria
La automatización siempre ha estado relacionada con el objetivo final de que la fuerza humana sea desplazada de un puesto de trabajo por la mecánica y la computarización, obteniendo procesos más rápidos y eficientes. Al aplicar automatización, tu empresa reduce sus costes al mismo tiempo que mantiene o incluso mejora el nivel de calidad. Los principios laborales se incorporan a la concepción de que una máquina realizara las mismas tareas en menor tiempo y con una precisión mucho mayor que la de un ser humano.
Las máquinas pueden operar con pesos mucho mayores de lo que un obrero podría mover en condiciones normales. Eso sí, tienes que considerar que su instalación requiere una mayor inversión a un plazo más largo. La exactitud y precisión que las máquinas aplican a los procesos de producción tienen su origen en principios físicos, de ahí su alta eficiencia.
De hecho, comprobarás que la ingeniería mecánica es una de las especialidades científicas existentes. A partir de ella es como hemos obtenido la compresión y la capacidad de impulsar, desarrollar y poner en práctica nuevas maneras de aplicar la automatización a la empresa, tanto diversificando las herramientas como sus ámbitos de utilización.
Las principales ventajas de la automatización en tu empresa
Automatizar los procesos de tu empresa, tanto si necesitas hacerlo completamente como de forma parcial, va a suponer una buena cantidad de beneficios a tu capacidad de producción:
- Ejecución de tareas repetitivas: el uso de software y de tecnologías evita que se produzcan errores debidos a un fallo humano, minimizando las pérdidas por las paradas de producción. Es decir, tu empresa producirá constantemente durante la jornada que sea necesario.
- Aumento de la calidad : la automatización de los procesos permite que las tareas de los operadores se coordinen a la perfección con el desarrollo de cualquier proceso dentro de la producción, evitando, de nuevo, errores y la consecución de tiempos muertos de inactividad.
- La reducción de los costes: al implantar la automatización en tu empresa, todo el trabajo se agiliza, tanto en dinero como en tiempo. Una vez afrontada la inversión inicial, los beneficios a partir de la implantación harán que la instalación se amortice a corto plazo.
- Control de los datos de la producción: como toda la información relativa a los procesos está informatizada, es mucho más sencillo elaborar informes y modificar los parámetros para insertar modificaciones o preparar distintos productos en cualquier momento.
- Monitorización de los procesos: la automatización implica la instalación de sensores en todos los dispositivos industriales que realizan trabajos automáticos. Con ello, consigues controlar en tiempo real la actividad y el estado de funcionamiento de todas las máquinas. Al detectar cualquier anomalía, tu equipo podrá actuar de inmediato y solucionar el problema de forma efectiva.
La automatización industrial es un concepto que no deja de evolucionar. Actualmente nos encontramos en los albores de la llamada Industria 4.0, en la que la tecnología digital y la integración del Internet de las Cosas definirán el futuro de la competitividad.